Resenhas
MARCUSE:
UMA
TRAJETÓRIA
SOARES,
Jorge Coelho. Londrina: Ed. UEL, 1999. 254 p.
Blanca Muñoz*
Narcuse há sido quizás el autor de la Escuela de Frankfurt más
conocido públicamente, pero es posible que el peor conocido de todos. Adorno
pudo librarse de la vulgarización
gracias al uso de un lenguaje filisófico de claras resonancias clásicas.
Estas resonancias ya planteaban una serie de dificultades a los curiosos
lectores no iniciados en el extenso y rico campo de la Filosofía. Sin
embargo, éste no há sido desgraciadamente el caso de Marcuse. Y decimos
<<desgraciadamente>> por la superficialidad que ello puede atraer
sobre un pensamiento. Las modas em Filosofía y Ciencia Social son tan nefastas
como la trivilización, y Marcuse pudo considerarse el filósofo de moda a
finales de los años sesenta y principios de los setenta. El Mayo francés actuó
como detonante de una serie de nombres teóricos que, hasta ese momento, se
habían reducido a un círculo de pensadores y de interesados exclusivamente
en la Filosofía. Pero
desde el momento en el cual, pasado el ardor estudiantil, se quisieron
reconstruir los orígenes de tal explosión el nombre de Marcuse apareció como el
de uno de los mentores responsables del estallido francês . Esta publicidad, a
menudo lanzada por sectores conservadores o por editoriales que veían
acrecentarse sus ganancias con obras que, hasta el año 68, estaban recluídas en
los cenáculos de minorías cultas, minorías que en su gran parte procedían de
otros campos ajenos al de la
Filosofía y es bien sabido que los filósofos académicos
llegan al resplendor de las ideas originales cuando sólo queda el trueno y el
relápago se apagó hacía ya tiempo, y si no basta con repasar detenidamente la Historia de la Filosofía. Pues
bien, el caso Marcuse puede ser considerado como un caso paradigmático de
publicidad interesda y de manipulación política, ya sea desde un sector como
desde el outro.
Podemos decir que de todas estas
circunstancias hubo dos posibles perdedores: la obra de Marcuse y, a la par, el
estudioso serio y profundo. La obra de Marcuse así sufrió destino de la moda:
cayó en desgracia en el momento en el cual otros intereses intelectuales e
ideológicos fueron pasto de ganancia para editores y empresas comerciales. Y en
segundo lugar, hubo un cierto rechazo por parte de una serie de sectores
académicos que tacharon al autor de Frankfurt com la etiqueta y excusa de
superficialidad.
Em ambos casos, se olvidó un tercer factor
más decisivo e importante, pero apenas citado. Marcuse se hizo incómodo de
sobrellevar. Su obra ponía en evidencia demasiadas cosas que estaban empezando
a pasar realmente, ya no eran hipótesis o previsiones propias de um tipo de
filosofía catastrófista. Los <<parientes>> políticos de Marcuse posteriores iban a poner
em cuestión el orden social, pero no desde la crítica teórica, sino desde la
crítica armada. Se hacía realidad la célebre frase de Marx de que el arma de la
lógica no podía sustiuir a la lógica de las armas. De este modo, intereses
políticos fueron relegando a la filosofía marcusiana al rincón de os recuerdos
anecdóticos de ser el pensador de una determinanda juventud airada estudiantil
tan acomodaticia como sus progenitores en el momento en el que se encontraban
com um título universitario y unas perspectivas de trabajo remunerado en el
bolsillo.
El "mito Marcuse " ahogó las
posibilidades críticas de su toería y fue deshechado por los sectores
considerados como dedicados "al pensamiento serio ". Lo cual
pesa aún en nuestros días.
Ahora bien, por qué hacer una revisión de
<<algo pasado de moda>>, dirán algunos? Ante esta pregunta, caben
varias respuestas. La primera podría ser que todos nosotros somos una
generación deudora del pensador alemán. Mas esta es uma razón trivial. Otra
razón sería la gran vigencia que cobra, a medida que pasa el tiempo, la teoría
crítica de Marcuse. El desarrollo histórico le está dando, lamentablemente, la
razón a muchas de sus previsiones sociales, económicas, políticas, culturales y
humanas. La tecnificación, la unidimensionalidad, la agresión, y la pérdida
cada vez em mayor medida de la identidad de los individuos, van en aumento
trágico coexistente con el peligro, ya casi familiar, de una catástrofe
destructiva sin precedentes.
Una razón distinta de las anteriores surge de
la consideración teórica expresa de que Marcuse y, lógicamente, a la Escuela de Frankfurt se le
debe el haber realizado una síntesis verdaderamente sugestiva entre el
hegelianismo, el marxismo y el psicoanálisis freudiano. Sínteisi precursora de
otras síntesis realizadas en el pensamiento contemporáneo y que colocan a la Filosofía <<em el
recto camino de la objetividad>>, podríamos afirmar parafraseando a Kant.
Marcuse tuvo el inmenso mérito de percibir
con la claridad hacia donde había de dirigir el rumbo de la teoría filosófica. Observó
certeramente cómo Marx había logrado hacer una ciencia de la dialéctica social;
pero también comprendió que Freud estructuró los pilares de una ciencia de la
conducta colectiva e individual humana. Y sólo hacía falta encajar unos
resultados con otros, replantear resultados anteriores a la luz de una nueva
situación histórica, situación histórica caracterizada por el advenimiento de
la sociedad post-industrial.
El hombre unidimensional que hace
algunos años sonaba a metáfora filosófica, se nos há ido haciendo tan frecuente
como ya es posible el final de la Utopía. Pero de esta descipción acertada de la evolución
histórica se ha pasado a un silencio y a un mutismo condescendiente que ya
estaba incluso previsto por Marcuse en
algunas de sus obras. Este silencio es que el que se hace necesario
romper y, a la par, analizar. Silencio que es posible que dure décadas, las
mismas décadas que tenga de vida la sociedad unidimensional y sus mantenedores
silenciosos. La valentía del libro de Jorge Coelho Soares . Marcuse. Una
trajetória, es precisamente que rompe el silencio al que se há sometido
durante años al autor de Eros y Civilización. Así, a lo largo de los
doce capítulos - que como si se tratase de una obra Musical, denomina como movimientos
- en lo que se estructura el libro Jorge Coelho hace un repaso esencial por
las grandes contribuiciones marcusianas que renuevan no sólo el pensamiento
crítico sino el análisis teórico del siglo XX. En este sentido, en el presente
estudio se enlazan las grandes cuestiones que mueven la filosofía dialéctica. Según
Coelho, el pensamiento crítico representa el impulso vital frente a una
realidad histórica, la cual, que hace de la autodisolución de los individuos su
tendencia natural. Siguiendo a Marcuse, en el libro del profesor Jorge Coelho
se recuerda como la desaparición de la teoría, entendida como crítica
dialéctica, supone hacer ilimitadas las fronteras de la explotación y del
egoísmo. La libre competencia, los mensajes repetitivos de los medios de
comunicación de masas, la agresividad y el militarismo, sólamente pueden
explicarse desde una sociedad construída sobre un orden en el que prevalece
<<el-ser-para-outro>>, la inautenticidad. El discurso ético
marcusiano, que Coelho subraya, está unido a la crítica hacia la irracionalidad
convertida en cotidiana. Como se analiza en Marcuse. Una trayetória, el
precio del progreso no es el ascenso de uma sociedad
<<ontologicamente>> determinada por la agresividad. En
consecuencia, para Coelho, Marcuse ha analizado de una forma perfecta la
función de la técnica, del lenguaje, de la práctica social que lleva a la
unidimensionalidad y, a la par, a la desublimación represiva.
El
resultado, entonces, surge de la convicción según la cual la investigación crítica
es el camino cierto para aclarar nuestra situación histórica. Es aquí en donde
la vigencia del autor de Frankfurt se hace expresa en la obra presente. Para
Coelho, siguiendo a Marcuse, se vive y se muere productivamente, siendo
instrumentos del negocio de la tecnología de la unidimensionalidad. Bajo el
ideal de la productividad se enmascara el propósito prácico de la eliminación
de una vida racional.
La desideologización general de la pretendida
sociedad científico-tecnológica convierte las interrelaciones sociales en una
fatal situación en la que la desintegración de la existencia apenas si es
perfectible. Como se comenta en el estudio reseñado, la neutralización del
piensamiento y la identificación con los modelos comunicativos, el lenguaje sin
resonancias ni profundidad, la vida humana cosificada, explotada y sometida al
fetichismo sin objeto ni fidelidad de la posesión de objetos a cambio de los
cuales se vende la existencia diaria, año, mês tras mês, son las consecuencias
históricas objetivas. Contra ello, el profesor Coelho reivindica la lectura de
Marcuse, desvelando las dimensiones sociales de la contemporaneidad: el
lenguaje unificado, la técnica como negoio, la ideología como piensamiento... Y
en este <<universo>>alienado, en el movimiento noveno del
libro se replanteael valor de la
Utopia, el poder de la contradicción y de las ilusiones. Desde Platón, la misión
histórica de la Filosofía
ha sido impedir el tiunfo total de lo inauténtico, del ser-para-otro revestido
bajo los ropajes de la ideología. De esta forma, Coelho destaca la dialéctica
de la felicidad que está como resorte escondido en el pensamiento bidimensional
marcusiano. En "A questáo da Utopia" y en "O último
Marcuse": a 'nova sensibilidade' como fio de Ariadne na busca de uma Nova
Estética", se indaga sobre las posibilidades efectivas que la estética
puede posibilitar. La obligación ética, por tanto, del pensador es enseñar a
los otros a ser libres a partir de la consciencia y la humanización. Para
Marcuse, la misión histórica del piensamiento nace de la búsqueda de la
actualidad del autor de Frankfurt, y magnífico, al mismo tiempo, su estudio
sobre la recepción de Marcuse en la investigación brasileña. Su perspectiva, en
suma, posibilita la esperanza con su profundo convencimiento en la acción de la
teoría como humanización que debe romper con la estructura arbitraria del mito,
de la ideología y de la miseria. Y en este sentido, el libro Marcuse. Una
trayetória, sigue el impulso marcusiano de construir una existencia
colectiva en la que la bidimensionalidad devuelva a los individuos una
cotidianidad dignificada y nueva.
Notas
* Professora de Teoria Social e
Sociologia da Cultura de Massas na Universidad "Carlos III" de
Madrid, no Departamento de Humanidades e Ciências Políticas e Sociología.
Autora de inúmeros artigos e livros vem se dedicando neles a refletir, à luz da
perspectiva da Escola de Frankfurt, sobre questões Sociais Contemporâneas. Entre
seus livros destacam-se: "Cultura y Comunicación, Introducción a las
teorías Contemporáneas (1989), "Teoría de la Pseudocultura"
(1995), e recentemente " Theodor W. Adorno: Teoría Crítica y Cultura de
Masas" (2000).
Recebido em: 15/08/01
Aceito para publicação em: 04/10/01